Gure protagonista Udal Erroldan ere agertzen da, 1910ean eta 1915ean. Ez, ordea, 1924an. 1910ean, 28 urteko emagin ezkongabe gisa jasota dago, Erdiko kaleko 26. zenbakian. Iruñean jaio zela zioen, 1882an, eta herrian 3 urte zeramatzala. Baita irakurtzen eta idazten bazekiela ere. Hurrengo erroldan, datara egokitutako datu berberak daude.

Lan egonkorra izan arren, oso urte gogorrak izango ziren Rosarentzat, hiru umeak kendu ondoren. 1913an saiatu zen Iruñera itzultzen eta udal emagin posturako oposiziora aurkeztu zen, baina ez zuen boto bakar bat ere lortu. Badirudi 1916 eta 1918 bitartean bere jaioterrira itzuli zela, Jose Julian Ozcoidirekin ezkondu zenean (1918), parrokoak bere eliztarra zela adierazi baitzuen.

Zer dela eta jo zuen Rosa Oteizak Arrasatera? Iruñetik hain urrun dagoen herri batera?

Bere kasa ala norbaitek lagunduta etorri ote zen? Ez dugu sostengu dokumentalik galderari erantzun ahal izateko. Hala izanik ere, hipotesi bat formulatzeko ahalegintxoa egin gura dugu.

Arrasaten, Martinez de Ubago Lizarraga deituradun Eduardok eta Albertok jardun zuten mediku gisa, biak Rosaren mutil-lagunaren anaiak.

Lehena, Candelaria Oquendo arrasatearrarekin ezkondua, 1898ko erdialdetik bizi zen emaztearen jaioterrian. Bere presentzia 1900eko biztanleen erroldan baino ez da dokumentatzen.

Bigarrena, Alberto Martínez de Ubago Lizarraga, berriz, 1902 inguruan iritsi zen, baliteke anaia joandakoan. 1910ean zioen zortzi urte zeramatzala Mondragoen bizi izaten. Ramona Milicua Larrañagarekin ezkondu eta bertan finkatu eta hazi zituzten seme-alabak. 

Rosa Oteizaren Arrasateko egonaldia Alberto Martinez de Ubagoren mediku lanarekin bat dator. Lagundu ote zion bere semeen osabak bizilekua finkatzen, bere burua indartzen, ahalduntzen eta emagin lana egiten? Segurutik, bai.

_{Ezkerreko lehenengo etxean, fatxadaren erdialdean armarria daukanean, bizi izan zen Arrasaten Rosa Oteiza (AZE, Mendia Funtsa).} 

Testuaren egilea: Anabel Ugalde (maistra, Historian lizentziatua eta Artearen Historian doktorea). Arrasate Zientzia Elkarteko kidea.

Bibliografia:

ASIRON, J. (2023/04/16) Rosa Oteiza, la modelo de la estatua de los Fueros, Noticias de Navarra. https://www.noticiasdenavarra.com/navarra/2023/04/16/rosa-oteiza-modelo-estatua-fueros-pamplona-6687786.html 

AZANZA, J. J. (2004) “Escultura conmemorativa en Navarra en torno al cambio del siglo: origen y consolidación de un género”, in “Revisión del arte vasco entre 1875-1939”, Ondare, 23, 391.

GARCÍA-SANZ-MARCOTEGUI, Á. (2012) La deriva ideológica de los Martínez de Ubago, una familia navarra de abolengo liberal, Memoria y Civilización, 15, 113-131

GIMÉNEZ, I (2010/12/19) “El rostro olvidado de los Fueros: Rosa Oteiza“, Noticias de Navarra.

MENDIBURU BELZUNEGUI, P. (2021) Rosa Oteiza y José Martínez de Ubago, Pregón siglo XXI, 61,30-33.

Arrasateko Udal Artxiboa:

Libro 17, sección A neg *, del 3 de septiembre de 1906 al 31 de diciembre de 1908, fol. 390.

Libro 18, Sección A, neg* 1, 1909–1910, fol. 119.

Padrón de habitantes, 1900, fol. 31.

Padrón de habitantes, 1910, fol. 15, 25.

Padrón de habitantes, 1915, fol. 12.

http://patximendiburu.blogspot.com/2022/04/jose-martinez-de-ubago-antes-y-tras-el.html

http://gerindabai.blogspot.com/2010/11/la-verdadera-historia-de-la-matrona-de.html

http://pelotamanoremonte.blogspot.com/2019/04/historias-depamplona-ano-1903-los.html

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La vida de Rosa Oteiza Armona no fue precisamente fácil. Nacida en Pamplona en 1883 en el seno de una familia modesta, fue la segunda de siete hermanos. Madre soltera, tuvo tres hijos (José, Julio y Luis) con José Martínez de Ubago Lizarraga, miembro de la alta sociedad pamplonesa. Posiblemente se conocieron cuando Rosa sirvió de modelo para la estatua con la que culmina el monumento a los Fueros (1895-1903), levantado en Pamplona.

El monumento es obra del arquitecto Manuel Martínez de Ubago (Pamplona, 1868-Zaragoza, 1928), con quien colaboró su hermano José (Pamplona, 1877-San Sebastián, 1953). Éste, además de arquitecto, era también escultor, y él fue quien modeló la figura de la alegoría de Navarra, inspirándose en la madre de sus hijos.

José Martínez de Ubago fue también arquitecto diocesano de Pamplona y alcalde de San Sebastián.

Las diferencias de clase entre Rosa y José fueron insalvables. Tanto que la vida sentimental y pública de éste transcurrió completamente al margen de Rosa.

En 1906 se prometió con una joven de Lodosa y dos años después, cuando iba a casarse en Zaragoza, donde ejercía su profesión, Rosa debió de presentarse en la iglesia con los tres niños. El escándalo fue de tal magnitud que se suspendió la ceremonia.

José Martínez de Ubago se trasladó a vivir a San Sebastián y se llevó consigo a los tres chavales, que vivieron en una pensión donostiarra que pagaba su padre, aunque sin trato con él. Les dio sus apellidos, Martínez de Ubago Lizarraga, desapareciendo por completo los de su madre. No tuvieron relación con la nueva familia que fundó su padre (se casó en 1923) y siempre pensaron que su madre había muerto joven. Nada más lejos de la realidad, pues Rosa Oteiza Armona falleció en Pamplona en 1970. En su esquela (Diario de Navarra, 17/10/1970) no hay ni rastro de los tres hijos.

Volvamos a 1908, cuando provocó la suspensión de la boda del padre de sus hijos y le quitaron los niños para siempre. En diciembre de ese año la hallamos en Mondragón, trabajando como comadrona, pues pidió licencia por enfermedad, poniendo en su lugar a Encarnación Goñi. La corporación municipal aceptó la sustitución por 2 meses. Volvió a pedir otra licencia por enfermedad en enero de 1911.

Nuestra protagonista también figura en el Padrón municipal, en los años de 1910 y 1915. No así, en el de 1924. En 1910 consta como matrona, soltera, de 28 años, viviendo en la calle del Medio 26. Decía ser nacida en Pamplona en 1882 y llevaba 3 años en la villa. Sabía leer y escribir. En el siguiente Padrón, los mismos datos adaptados a la fecha.Pese a contar con un trabajo estable, debieron de ser años durísimos para Rosa, después de que le arrebataran sus hijos. En 1913 intentó volver a Pamplona y se presentó a la oposición para la plaza de comadrona municipal, aunque no consiguió ni un solo voto. Entre 1916 y 1918 retornó a su ciudad natal, pues cuando se casó con José Julián Ozcoidi (1918) el párroco manifestó que era su feligresa.

¿Por qué recaló en Mondragón Rosa Oteiza? ¿En una villa tan alejada de Pamplona?

¿Vino sola o porque alguien se lo sugirió? No tenemos ninguna certeza documental para poder responder a la cuestión. No obstante, vamos a proponer una posible contestación.

En Mondragón ejercieron como médicos dos Martínez de Ubago Lizarraga, Eduardo y Alberto, ambos hermanos de José, el padre de sus hijos.

El primero, casado con la mondragonesa Candelaria Oquendo, habitaba aquí desde mediados de 1898. Su presencia sólo se documenta en el Padrón de habitantes de 1900.

El segundo, Alberto Martínez de Ubago Lizarraga, debió de llegar hacia 1902, pues en 1910 dice que lleva ocho años residiendo en la villa guipuzcoana. Se casó con Ramona Milicua Larrañaga y ambos se establecieron en Mondragón, donde criaron a sus hijos.